Por Rodrigo Serrano, vicepresidente Corporativo de Innovación y Desarrollo en Wisetrack Corp

Estamos a pocas semanas de la Navidad, por lo que el comercio ya hace unas semanas activó todas sus ofertas para un nuevo período, en donde, según cifras entregadas por la Cámara de Comercio de Santiago, las ventas diarias durante los días previos a esta fecha suben a un 89% por sobre las de una época normal.

Para cumplir con este importante aumento de demanda, el comercio tuvo que robustecer su operación logística principalmente en áreas como el transporte, centros de distribución y tiendas y procesos de última milla.

La cantidad de camiones que mueven mercancía dentro y entre ciudades crece considerablemente, aumentando así “la oferta disponible” para las bandas delincuenciales que se especializan y financian con el robo y asalto a camiones que se encuentran en ruta, haciéndose su propia Navidad durante diciembre de cada año.

Para muchos ciudadanos de a pie, el robo de mercadería de camiones pertenecientes a grandes empresas no es un tema preocupante y tiene poca connotación social pues, se asume que la carga está asegurada y, al no haber daño físico a las personas, no es tan grave como un asalto a una casa particular o un portonazo a una familia.

Es verdad que es mucho más impactante, a nivel sicológico, el saber de una familia que fue amenazada mientras delincuentes desvalijaban su hogar, pero el asalto a camiones tiene una connotación social, que no es tan evidente y que hace aún más daño a la sociedad, pues el destino del dinero obtenido con la venta de la mercadería, es parte de las actividades de financiamiento del crimen organizado.

Sin embargo, no todo es pesimismo. Las estadísticas arrojan un dato alentador. Si se cuenta con la tecnología adecuada y un robo es detectado e informado en un lapso de 15 o 30 minutos, la recuperación del camión es prácticamente segura. Aquí, el protagonista es el monitoreo y análisis de datos en tiempo real, detectando excepciones y conductas anormales, herramienta que, poco a poco se está introduciendo en el mundo del transporte, pero que, día a día se ha ido transformando en una pieza fundamental en la prevención de robos y pérdidas.

El análisis oportuno y adecuado de los datos puede ayudar a mitigar estos riesgos de diversas maneras, identificando patrones y áreas geográficas con mayor riesgo, detectar desviaciones de ruta, paradas no programadas o cualquier comportamiento anómalo, identificar tendencias emergentes en modalidades de robo o áreas de riesgo creciente, permitir auditorías y establecer responsabilidades en caso de delitos, generar ranking de conductores “descuidados” y además, con las nuevas aplicaciones de inteligencia artificial, hacer analítica de video y analítica predictiva.

Todos podemos aportar a una Navidad más feliz y segura, como autoridades, como proveedores de tecnología, como transportistas, como camioneros, como conductores y por supuesto como consumidores, evitando adquirir productos del, por todos conocido, comercio ilegal.